Una instancia de encuentro y diálogo, pensadas para canalizar la comunicación, participación y apoyo entre la familia de un niño y el establecimiento educacional. Así definen los expertos las reuniones apoderados, que por lo demás, promueven una relación de mayor confianza entre el profesor jefe y los padres o apoderados.
Pero esta instancia no es valorada por toda los padres, ya que para muchos es sinónimo de un trámite molesto que evitan a toda costa. Norma Drouilly, directora de la Escuela de Educación de la Universidad Andrés Bello, explica que estos encuentros “permiten conocer más de cerca los objetivos que persigue el colegio, la profesora o profesor, se pueden manifestar inquietudes y mantenernos al día de lo que pasa con nuestros hijos”.
Fuente: Diario la segunda